Mujeres Campesinas Generamos Riqueza y Vivimos en Pobreza.

 

COMUNICADO

15 DE OCTUBRE DIA DE LA MUJER CAMPESINA

Mujeres de diversas organizaciones aglutinadas en MESOAMERICANAS EN RESISTENCIA POR UNA VIDA DIGNA que estamos luchando por nuestra vida reivindicamos este día como Día de la Mujer Campesina y nos pronunciamos para decir una vez más que:

Las mujeres Salvadoreñas somos el 52.7% de la población y más de la tercera parte somos campesinas: 36.44%. La gran mayoría actualmente sobrevivimos en condiciones de pobreza y de exclusión de los derechos que como humanas nos corresponden. A estas condiciones les llamamos violencia económica hacia las mujeres.

Actualmente vivimos una crisis mundial que tiene muchas dimensiones: es financiera, climática, ambiental, alimentaria, energética, económica y de valores. Esta crisis es provocada por un sistema global de carácter patriarcal neoliberal y lesbofóbico que pone en el centro las mercancías y su principal objetivo es la acumulación de capital en donde las mujeres no somos vistas como sujetas políticas y económicas.

El actual modelo capitalista y patriarcal ha generado en la sociedad y en la vida de las mujeres y principalmente en las mujeres campesinas, un desgaste en la calidad de vida, recargándoles mayores responsabilidades a las mujeres para hacer frente a las repercusiones del alto costo de los servicios básicos y los medios de subsistencia.

Reproducir la vida humana requiere hoy mucho trabajo y cuidado por parte de las mujeres campesinas. Somos las principales productoras agropecuarias: trabajamos la tierra, mantenemos las semillas, recolectamos las cosechas, acarreamos agua, leña, cocinamos, cuidamos el ganado, las aves, animales de corral, comercializamos; además también cuidamos a las hijas e hijos, personas adultas mayores, realizamos trabajo en la comunidad. Un 80% de la producción de alimentos recae en nosotras.

Hoy estamos viviendo con más intensidad, en nuestros cuerpos y vidas el impacto de la falta de oportunidades, la pobreza y extrema pobreza, el modelo económico está generando restricciones para nuestro proyecto de vida tanto en el campo como en la ciudad ya que el mercado está limitando aun más nuestros derechos a la alimentación sana, trabajo digno, educación integral, salud, vivienda y seguridad.

Estamos cansadas de ser las responsables del trabajo reproductivo del hogar, sin que este sea valorado ni moral ni monetariamente, porque ha limitado históricamente nuestra autonomía, desarrollo y bienestar como mujeres.

Demandamos beneficios sociales al estado salvadoreño:

Acceso a la salud sexual y reproductiva, a educación no sexista, acceso a la tierra y al agua potable en nuestros hogares como un Derecho Humano, al saneamiento básico; la asistencia técnica y a créditos; al trabajo remunerado y a una jubilación que nos permitan una vida productiva y una vejez con dignidad.

Queremos trabajo y salarios dignos en el campo, aumento al salario rural y mayores oportunidades de empleo para las campesinas, que permita el acceso a las condiciones mínimas de alimentación y servicios básicos.

La protección y rescate de nuestros recursos naturales, aplicando efectivamente políticas y estrategias que garanticen su sostenibilidad.

Exigimos el derecho de los pueblos a definir sus políticas agrarias y alimentarias, a proteger y a regular la producción y el comercio agrícola interior con el objetivo de conseguir un desarrollo sustentable y garantizar la seguridad alimentaria. Como una estrategia para romper con las políticas agrícolas neoliberales, impuestas por la Organización Mundial del Comercio, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional y con el sistema económico capitalista dominante, que promueven un modelo de producción agrícola y alimentaria TOTALMENTE INSOSTENIBLE. Queremos decidir sobre nuestros alimentos y los de nuestros hijos e hijas, sin destruirnos a nosotras mismas y a la Madre Tierra.

No renunciamos a nuestras semillas nativas y criollas y a nuestra tierra.

Seguimos rechazando los tratados de libre comercio, disfrazados como Acuerdos de Asociacion.

A cuatro años de la implementación del TLC con Estados Unidos, se han visto reflejados los impactos negativos en la sociedad y principalmente en las mujeres. Con anterioridad se expresó que los tratados de libre comercio son una estrategia de las empresas transnacionales con la finalidad de fortalecer su hegemonía y salvaguardar sus intereses mercantilistas; y en el caso concreto de nuestro país sus resultados han sido la pérdida de soberanía alimentaria, generación de empleos precarios en el sector maquila y la exigencia de indemnizaciones millonarias como el caso de la demanda que interpuso ante Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), la empresa “Pacific Rim” que pretende que el Estado Salvadoreño le pague $77 millones.

EXIGIMOS A LOS Y LAS DIPUTADAS LA NO RATIFICACION AL ACUERDO DE ASOCIACION CON LA UNION EUROPEA.

Contrario a lo que se espera de un gobierno que dice estar comprometido con las poblaciones empobrecidas, negoció con la Unión Europea (UE) un nuevo tratado comercial, denominado Acuerdo de Asociación (AdA) que pretende la creación de una zona de libre comercio, que supere las reglas de la Organización Mundial de Comercio OMC y los Tratados de Libre Comercio ya negociados con otros países, con la lógica de profundizar los procesos de liberalización y privatización de los servicios públicos, la comercialización de los recursos naturales como el agua ya que pretende ser privatizado y explotado como recurso para la mercantilización y la producción de energía, las compras del Estado y la imposición de las patentes y la propiedad intelectual, en la lógica de favorecer a las transnacionales europeas.

EL ACUERDO DE ASOCIACION CON LA UNION EUROPEA, va agudizar la exclusión y los conflictos en la región CENTROAMERICANA.

En razón de lo expuesto exhortamos al actual gobierno a rectificar su proceder y que su gestión se enmarque en la búsqueda de una verdadera integración, basada en los principios de solidaridad, de autodeterminación y de complementariedad; en la lógica de asegurar y respetar la justicia social, el buen vivir, la diversidad cultural, la equidad de género y el derecho al desarrollo que nos merecemos; todo esto reclamamos las mujeres de las organizaciones sociales y el pueblo salvadoreño.
Las organizaciones demandantes:

MUJERES MESOAMERICANAS EN RESISTENCIA POR UNA VIDA DIGNA♀LAS DIGNAS ♀ASOCIACION DE MUJERES RURALES♀ COLECTIVO DE MUJERES ARTESANAS LA ESPERANZA DE TONACATEPEQUE♀ MUJERES DE SAN SALVADOR♀ RED DE MUJERES AMBIENTALISTAS ♀ MUJERES Y JUVENTUDES NAYARIT ♀ MOVIMIENTO DE MUJERES DE SANTO TOMAS♀ ABRIENDO VENTANAS ♀ COLECTIVO DE MUJERES ARTESANAS DE XILOPANGO ♀ CONCERTACION DE MUJERES ♀ ORGANIZACIÓN DE TRABAJADORAS DEL SEXO ♀ RED DE MUJERES POR UNA VIDA DIGNA LIBRE DE VIOLENCIA ♀ MUJERES JOVENES MESOAMERICANAS ♀ COMITÉ COORDINADOR DE MUJERES DE LA ZONA NORTE DE USULUTAN ♀ MUJERES DE TAPALHUACA ♀ CENTRO DE DEFENSA DEL CONSUMIDOR ♀ SINTI TECHAN ♀ ASOCIACION COMUNITARIA UNIDA POR EL AGUA Y LA AGRICULTURA ACUA ♀ IGLESIA BAUTISTA ENMANUEL ♀ RED DE CONSUMIDORES Y CONSUMIDORAS DE EL SALVADOR ♀ MOVIMIENTO FUENTE DE AGUA ♀ CENTRO DE INTERCAMBIO Y SOLIDARIDAD ♀ UNIDAD ECOLOGICA SALVADOREÑA ♀ CEICOM ♀ FUMPADECA